La concejala de Educación, Mª Victoria Bermejo, ha visitado esta mañana la biblioteca del Campo San Francisco que ha abierto sus puertas, como punto de lectura, por cuarto año consecutivo. Este espacio cuenta con más de 150 ejemplares de libros en español y en inglés para diferentes edades. Además, este año, se ha incorporado un fondo específico de libros sobre Salamanca (haz clic sobre la imagen para ver el vídeo)
Uno de los principales objetivos que persigue el Ayuntamiento de Salamanca con esta apertura es fomentar el gusto por la lectura entre los más pequeños. Por ese motivo, hasta el 31 de julio, de lunes a viernes y en horario de 11’00 a 14’00 horas, este espacio se convierte en un punto de encuentro para que niños y jóvenes puedan disfrutar de cómics, álbumes ilustrados, libro-juegos, libros informativos, novelas y libros para bebés.
Los martes y jueves del mes de julio, a las 12’30 horas, hay cuentacuentos dirigidos al público familiar, a los que han asistido ya más de 1.000 personas; mientras que los lunes, miércoles y viernes, a las 12’00 horas, se han programado talleres de animación a la lectura que han contado ya con la participación de 400 personas.
Una de las novedades de este año es un concurso de ilustración y micro relatos para niños desde 4 años, que lleva por título “Voces en el parque”. Cada participante puede presentar una única ilustración y la técnica es libre. En el caso del microrrelato también se acepta sólo uno por persona y no puede exceder las 150 palabras. Los textos y las ilustraciones deberán hacerse en el propio parque. Con las creaciones presentadas al concurso se realizará un libro digital disponible para su consulta y descarga. El ganador se dará a conocer el 31 de julio, a las 10’00 horas, y recibirá un lote de material escolar. Hasta el momento se han presentado una veintena de trabajos.
Agradecemos mucho, muchísimo la difusión, pero ni las actividades ni las sesiones de cuentos se hacen solas; tampoco la selección de libros ni la propuesta de concurso; ni las mesas ni las sillas se colocan solas cada día; la música que se escucha todas las mañanas en el parque o las propuestas de taller, nada de esto de hace solo. Y cuesta muy poco poner quién lo hace. Y ayuda. E ilusiona.
