El vecino lee un libro
Koen Van Biesen
Tramuntana, 2013
Es hora de leer. El vecino necesita tranquilidad. Se sienta. se pone cómodo. Abre el libro y… un ruido infernal le impide continuar. Y es que su pequeña vecina no entiende de horarios ni de lecturas, solo de diversión. ¿Encontrará el protagonista la manera de hacerle entender que necesita silencio para leer? ¿O será ella la que le abra los ojos a él?
Esta divertida historia ilustrada que publica la editorial Tramuntana nos descubre no solo las posibilidades de las onomatopeyas para enriquecer un argumento muy sencillo sino también ensalza el poder de la lectura, como elemento de disfrute solitario o compartido.
No es difícil ponerse en el lugar de ese vecino desesperado por encontrar el silencio que necesita para disfrutar de su libro, ni tampoco en el papel de la niña que intenta distraerse de su soledad con un montón de posibilidades, hasta que descubre la que necesita.
Nuestros lectores, curiosos por naturaleza, han explorado las posibilidades de los sonidos que se escondían en este divertido álbum ilustrado y a la vez complementan un relato que antes se leía y se veía con la posibilidad de …¡escucharlo! Aquí os dejamos con su audiohistoria.
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