Llevamos toda la semana participando en la actividad GIRANDO AL VERDE de Savia Salamanca con el objetivo de concienciar a todo tipo de públicos para crear entre todos una ciudad más verde, más sostenible y más saludable. Nosotras aportamos nuestro granito de arena con la sesión de cuentos HABÍA UNA VEZ UNA SEMILLA en la que recordamos que, para que algo crezca, hay que dejar actuar a la naturaleza pero a la vez dedicarle tiempo, cariño, palabras, afecto… Terminamos siempre con una sonrisa enorme en la cara al ver a los pequeños recoger la semilla que les entregamos de regalo, y les vemos acunarlas, nos prometen que las van a cuidar y que saldrán flores con tantas historias y colores como la nuestra.
¿Y sabéis que? ¡Que ya están creciendo! Es increíble cómo la magia de los cuentos y de la emoción ha hecho que esas pequeñas semillas, que podría ser olvidadas nada mas llegar a casa o simplemente no crecer por falta de cuidados, pues es increíble descubrir cómo están naciendo y demuestran que el cariño es tan importante como la propia naturaleza de las cosas. Millones de gracias por compartir, esperamos mil fotos de vuestras flores porque entre todos, ¡podemos crear un enorme jardín! Gracias, gracias y gracias por hacer que nuestras sesiones de cuentos no sean solo el ratito que compartimos sino auténticas experiencias de vida en familia.
*Gracias especialmente a la familia de gatines por tener tanta magia y a la mamá de Lore por cuidar tanto todo 🙂