He decidido que, como lo mejor de aprender es ir corriendo a enseñar lo que has aprendido, voy a ir haciendo crónicas paralelas de mis sesiones de formación en la #GiraMujeres de Coca- Cola e Impact Hub Madrid. Esto por una parte me va a ayudar a reforzar los contenidos mas interesantes (porque lo que impacta se recuerda mucho mejor) y va a ayudar a otras mujeres que pueden estar necesitando algunas pistas en sus caminos de emprendimiento. Antes de empezar os voy a poner en contexto: desde que en el año 2013 Soraya y yo decidimos emprender y crear una empresa propia a la que llamamos Unpuntocurioso, desde entonces siempre he apostado por la FORMACIÓN y por seguir aprendiendo en todos los contextos en los que fuera posible ¿por qué? Porque al empezar no teníamos ni idea, pero ni idea, no sabíamos nada, no teníamos conocimientos de finanzas ni de gestión de empresas ni de la durísimo que iba a ser convertirnos en autónomas o sentirnos solísimas con nuestra idea de negocio en cualquier contexto. Contábamos solo con el apoyo de la familia (que madre mía nunca podremos agradecerles suficiente lo mucho que nos apoyan) y con el dinero de la indemnización que nos dieron al despedirnos de nuestro trabajo anterior en la Fundación Germán Sánchez Ruipérez. Y eso si, contábamos con algo que nos ha salvado en muchas ocasiones: NUESTRA CREATIVIDAD. A partir de ahí nuestra historia se construye con mucho esfuerzo, muchas semanas dedicadas 24/7 al trabajo, muchas decepciones combatidas con acciones de marketing creativas y curiosas (nuestro punto de partida) y muchas ganas de que nuestra metodología de trabajo en torno al libro – innovadora y pionera aquí y en cualquier otro punto del planeta- llegue tan lejos como nos permitan nuestras ganas de seguir luchando por implementarla en contextos educativos, sociales y culturales. Aquí seguimos, que no es poco.
AUTOLIDERAZGO Y AUTOGESTIÓN
En la primera sesión Pilar Rodríguez nos ha hablado de que somos locomotoras que nos llenamos de vagones y a veces vamos tan cargadas que es difícil seguir manteniendo el ritmo. Lo ha clavado. Solo con el huequito que me deja ver la pantalla de Zoom y las opiniones del resto de compañeras en el chat me ha dado cuenta de que muchas hemos vivido las mismas situaciones de soledad, fracaso, incapacidad de decir no, miedo a equivocarnos, falta de seguridad… De repente me he trasladado sin querer a aquella vez que nos llegó una multa terrible de Hacienda porque nuestro primer gestor se “había olvidado” de presentar dos veces los IVAs trimestrales de la empresa ¡y ni siquiera lo reconocía! Recuerdo perfectamente aquella sensación de impotencia de “no tener ni idea de cómo arreglar eso porque nunca nos habíamos responsabilizado de esa parte de la empresa”. Y a partir de ahí cambiamos (de gestor y de actitud: un buen autónomo tiene que saber de todo aunque no lleve el control de todo). O también me ha venido a la mente el maravilloso año 2019, donde fuimos finalistas del Premio Cultural de Castilla y León, comenzamos a trabajar en un montón de sitios nuevos, teníamos el calendario lleno y montones de propuestas que SE HICIERON HUMO CON LA PANDEMIA. Y en lugar de agarrarnos al fracaso y al miedo nos hicimos fuertes y apostamos por la sostenibilidad y la digitalización y… Aquí seguimos, que no es poco.
Pilar nos ha dado unas sencillas pistas que estoy segura que os pueden ayudar, tanto en el contexto de emprendimiento como fuera de él. La primera es sencilla pero vital: APRENDER A DECIR NO. La cruz de los autónomos y de las personas con buen corazón, que nos vamos dejando llevar, nos pensamos que total, podemos una vez mas, que es importante, que hay que intentarlo y nos quedamos en el camino. Y si nos quedamos en el camino no podemos seguir otra de las pistas mas importantes: AUTOCUIDADO, porque no hay empresas que funcionen sin personas detrás, y cada persona es la parte clave de su empresa y si esa persona no está bien ¿qué puede aportar? ¿cómo va a hacer que funcione otra cosa que dependa de ella? Imposible. Para conseguir este objetivo a nivel empresarial es imprescindible que nos cuidemos a nivel personal y por eso otra pista es mantener RELACIONES AFECTIVAS GRATIFICANTES, tener una red emocional segura (ya os he dicho qué pensaba de la familia al inicio de este post) que nos pueda ayudar a mantener los pies en la tierra y a desconectar y a la vez a seguir siendo los mismos independientemente de que nos hayamos convertido en empresarios o no, porque personas seguimos siendo igual. Aquí entra en juego otra pista que es muy importante y difícil de mantener: la AUTOESTIMA. Muchas veces se ve mermada cuando tu trabajo te expone constantemente el público y dependes de la gente, así en general, yo hablo mucho de la gente y me quejo (cómo es la gente, qué gente, si es que no se puede con la gente) pero lo que más me gusta de Unpuntocurioso es que trabajamos con personas y os puedo decir uno a uno el nombre de todos los niños que vienen a las sesiones de nuestros programas de lectura y creatividad y también el de sus padres. Puede nombrar a todas las personas con las que he trabajado en bibliotecas, centros escolares y otras instituciones porque cada una de ellas es importante y ha hehco que la historia de nuestra empresa se haya convertido en lo que es ahora. Ya os lo he dicho: Aquí seguimos, que no es poco.
Y Pilar también nos ha hablado de no incentivar nuestra tendencia a ver las cosas de forma catastrófica (a veces me ha dado la sensación de que me hablaba directamente a mi) sino hacerlo con perspectiva. Y después de 10 años si he aprendido algo ha sido eso, la verdad. Al principio cada error nos costaba un dolor, cada cambio en algo que teníamos sumamente preparado nos hacía sudar la gota gorda, y aún así lo asumíamos todo con una sonrisa y con mucho humor y he de deciros que en momentos muy complicados EL SENTIDO DEL HUMOR nos salvó (este consejo lo añado yo). Una vez nos fuimos a un pueblo en Zamora que se llamaba Maire y en realidad teníamos que estar en Mahide y aquel día no solo hicimos récord de velocidad en carretera (nunca lo hagais) sino que llegamos cantando y lo pasamos genial. Y lo de Hacienda terminó con una visita al amable funcionario que nos ayudó y de regalo una botella de vino bueno que evidentemente nos rechazó y nos bebimos entre las dos. Otra vez fuimos a un evento institucional y nos alejaron en un hotel diferente al resto de ponentes porque, bueno, nadie nos explico por qué. Era evidentemente mas modesto que el otro pero después todos los del evento querían quedar con nosotras para hacer los planazos tan guais que hacíamos en nuestro tiempo libre y “oh, no podemos, tenemos que irnos a nuestro hotel que está muy lejos”.
Al terminar esta primera sesión me he sentido bien, profesionalmente, porque no soy la misma que era hace cinco años ni estoy ni muchísimo menos tan perdida. Algunas respuestas, como la RESILIENCIA, ya las sabía pero me ha venido bien recordarlas. Otras las necesitaba (por ejemplo no sabía que el concepto de resiliencia viene de unir resistencia y flexibilidad). Y así es como nos vamos haciendo, ¿no? Conectando con personas que comparten las mismas experiencias, haciendo preguntas, escuchando, compartiendo nuestras historia. Por eso no me arrepentiré nunca de seguir aprendiendo y participando en estas iniciativas tan necesarias como esta #GiraMujeres de Coca Cola. Y esto ha sido solo el principio, pero va a merecer la pena, seguro.
