Cuando Soraya Herráez y yo, Rebeca Martín, miramos atrás, nos cuesta creer que sigamos aquí. Hace diez años solo pretendíamos seguir desarrollando un trabajo que nos apasionaba – animar a leer- pero convirtiéndolo en un proyecto de emprendimiento tras el cierre del Centro Internacional del Libro Infantil y Juvenil de la FGSR, donde llevábamos trabajando seis y siete años respectivamente. Pusimos nuestra creatividad a funcionar y llamamos a todas las puertas presentando nuestra metodología de trabajo. Algunas se abrieron y a día de hoy siguen abiertas, como la Biblioteca de Villamayor o el Centro de Profesores de Salamanca. Otras costaron más pero nunca dejamos de intentarlo hasta conseguirlo. Quizás esa es una de nuestras señas de identidad la perseverancia y al amor por nuestro trabajo.
Dispuestas a sacar adelante el proyecto como fuera nos dedicamos a escuchar a la gente y a atender sus peticiones. Fue así como surgió nuestro programa de animación lectora para bebés, PUNTO DE CUENTO, o LEEMOS EN INGLÉS, en el que les acercamos el idioma a través de los cuentos. Mientras tanto nos dábamos a conocer en la calle con sesiones clandestinas, intervenciones urbanas (siempre respetuosas) y un SI, PODEMOS siempre por delante. Pronto comprendimos que el público no entiende de distancias y comenzamos a viajar a Valladolid, Zamora, Santander… ¡hasta llegamos a Chile! Y todo gracias al potencial de las redes sociales y a la máxima que siempre respetamos a la hora de trabajar: contar, crear y compartir.
Son las claves que nos han permitido internacionalizarnos y trabajar estrechamente con instituciones chilenas como la Fundación Entrelíneas; abrir una nueva sede en Jaca de la mano de Soraya que ahora es la responsable de Unpuntocurioso de Aragón; seguir haciendo crecer el equipo curioso con la incorporación de Lorena, que comenzó haciendo prácticas con nosotras y ya llevó cuatro años; y contar con el apoyo – lo más difícil de conseguir – de instituciones como la Junta de Castilla y León, el Ayuntamiento y la Universidad de Salamanca o el Ministerio de Cultura a la hora de desarrollar nuestras propuestas curiosas. Todo esto ha sido posible gracias a un planteamiento innovador vinculado con la lectura y la creatividad, en el que trabajamos de lo oral a lo digital pero sin perder lo más importante: la emoción, la capacidad de empatizar con el lector y ofrecerle palabras para poder ser más libre, más crítico, más creativo.
Nos emocionamos en cada actividad que realizamos, por pequeña que sea, al ver la reacción de las familias y la ilusión de los niños. Nos da fuerzas para seguir planteando nuevas propuestas y no estancarnos en un mundo que va tan rápido que nos obliga a estar constantemente haciendo crecer nuestras ramas, como si fuéramos un árbol, sin olvidar lo más importante: mantener las raíces.
Así que aprovecho nuestro décimo cumpleaños para, desde este espacio que nos presta el periódico digital SalamancaRTValDia (otro gran apoyo desde el comienzo de nuestra historia), agradeceros a todas y cada una de las personas que formáis parte- o habéis formado parte- de nuestra comunidad curiosa la confianza, las palabras, el respeto por nuestro trabajo y la ilusión compartida. No ha sido fácil, pero sin vosotros hubiera sido claramente imposible. Estamos hechas de los pedacitos que nos habéis ido regalando de vuestro tiempo y cariño para crear una nueva forma de entender la lectura y el libro que se adapta a la actualidad sin perder la esencia que tenemos como personas.
Brindamos desde aquí por otros diez años mas,
¡pero a vuestro lado!
Rebeca Martín García
