Me gusta mucho mi casa. Me gusta mucho mi casa porque se parece a mi cara. Y mi cara, porque se parece a mi casa. Sé que es un poco complicado de entender pero os voy a enseñar una imagen y lo veis enseguida: los pelos de mi cabeza, parece que son las tejas. Los ojos son las ventanas que se abren cada mañana. La boca es una puerta que siempre tengo abierta y en el medio está la nariz que es un timbre y hace así: ring ring.
Ya se qué mi casa parece pequeña pero más pequeña era la casa de Tomasa y cabían casi todos sus vecinos. Juanito glotón, en un rincón. La abuela Rosario en un armario. Y así un montón hasta que Tomasa se cansó, pero vais a tener que ver el cuento para saber cómo termina esta divertida historia….
Total, que me gustaba mucho mi casa pero también quería tener vecinos así que poco a poco, mi casa se convirtió en un BARRIO. UN barrio lleno de colores. Un barrio lleno de gente y de canciones, a los que me encanta saludar con mucho ritmo, ¿me acompañaís?
Me gusta tanto la gente que me encanta mi barrio, un barrio donde todos somos diferentes. Algunos altos, otros bajos, más simpáticos o menos simpáticos. En familia o solitarios, mayores o más jóvenes, todos distintos y todos increiblemente curiosos ¡por eso me gustan!
Y ahora, ¿qué te parece si tu también haces tu propio barrio de colores? Dibuja sobre un folio un edificio, luego ponle color y recorta. Después dibuja otro distinto, y así hasta que puedas crear un barrio propio. Hay millones de posibilidades, puedes empezar por imprimir alguna plantilla como esta que adjuntamos a continuación:
Esperamos que hayáis disfrutado mucho vuestra visita al BARRIO DE COLORES, y nos encantaría que dedicarais unos minutos a escribir algo sobre nuestro trabajo en este formulario con una breve reseña https://g.page/unpuntocurioso-salamanca/review?np,
¡nos ayudaréis mucho a seguir creciendo! ¡Abrazos grandes!