Nos gustaría mucho ser las primeras mujeres en hacer Historia, por ejemplo, en el campo de la Ciencia. Asi que llevamos tiempo poniendo a prueba nuestro ingenio y quizás asi conseguiremos crear algo increíble relacionado con los números pero… ya ha habido otras mujeres extraordinarias que lo hicieron antes como Ada Lovelace. Su madre fue matemática también y su padre, poeta, y ella se quedó con lo mejor de los dos. Fue la primera programadora informática pero además defendía la “ciencia poética” porque le gustaban tanto las dos disciplinas… Quizás habría sido feliz inventando breves poemas matemáticos como este de Raúl Vacas, ¿jugamos?
A lo mejor si conseguimos viajar al Espacio, ya que siempre nos dicen que vivimos en la luna, si conseguimos viajar hasta otros planetas podemos cambiar la Historia. Pero, ¡un momento! Ya hubo otras mujeres antes que lo hicieron, entre ellas Valentina Tereshkova que estuvo 71 horas en el espacio, en el año 1963, realizando 48 vueltas alrededor de la Tierra en la nave Vostok VI, sin apenas espacio para moverse y con el traje puesto en todo momento.
O podemos ser las primeras mujeres en inventar algo relacionado con la tecnología, que como estamos todo el día pegados a la pantalla… Sería increible, revolucionar el mundo con una forma de comunicarnos sin cables que nos permita consultar información de una Red compartida por todos. Ay, ¡si ya existe! Es la Red Wifi y no se habría desarrollado sin el trabajo de Heddy Lamar, una actriz de Hollywood guapísima que además era una increíble inventora. Sin wifi no podríamos estar conectados como estamos, e incluso el lobo de los cuentos, por ejemplo, no habría sido el mismo lobo de los cuentos.
Estoy pensando que a lo mejor no tenemos que ser las primeras mujeres en hacer algo increíble, sino en seguir el modelo de lo que otras hicieron ya antes, y que nos sirvan como ejemplo para convertirnos también en mujeres extraordinariamente curiosas. Nosotras vamos a intentarlo con la ciencia de las historias, con el poder de los cuentos, con la magia de las palabras que se convierten en algo diferente dependiendo de la cabeza a la que lleguen. Y ahora, SOIS VOSOTROS LOS QUE TENÉIS QUE BUSCAR EN QUÉ SOIS EXTRAORDINARIOS PARA NO DEJAR DE CREER NUNCA EN VUESTRO PODER ¡en los cuentos que os hemos contado podéis encontrar el inicio de lo que estáis buscando! ¡Y si necesitais más recomendaciones podéis acceder a nuestra guía EL CEREBRO LECTOR, que une ciencia, lectura y creatividad ¡con un montón de títulos para disfrutar!
