Contar en lugares nuevos hace que los nervios comiencen a florecer ya que no sabes cual será la reacción del público. Comienzan a brotar dudas si les gustará o no las historias que tenemos preparadas… pero tenemos que decir que todo esto se fue en el mismo momento que pisamos la BIBLIOTECA PÚBLICA DE ALAEJOS.
Isabel, la bibliotecaria, nos recibió con una gran sonrisa. Después de preparar el espacio entre todos y mientras esperábamos a los seres curiosos -en este caso bebés porque era una sesión dirigida a ellos- curioseamos todas las estanterías y el gran fondo de libros que tienen.
La sesión con las familias y sus bebés, que se acercaron al primer cuentacuentos que se hacía para esa edad, fue GENIAL. El silencio, la atención, sus ojos sin apenas parpadear, la participación en las historias… por cada uno de los participante, pequeños y grandes, dio lugar a un ambiente completamente mágico que nos dibujo una sonrisa de oreja a oreja.
GRACIAS a todos por venir. Por contagiarnos esa magia al ir contando y ver vuestras caras de disfrute. Gracias a Isabel por contar y confiar en nuestro trabajo. Esperamos volver muy pronto por las tierras de Valladolid y seguir descubriendo recovecos de esa zona.